La Alameda es el parque
más antiguo de Quito, conocido antes por los indios como
"chuquihuada" (en quichua, punta de lanza); está ubicado en la
parroquia San Blas, en el centro de la ciudad, ocupa una superficie de 6 hectáreas
cerradas por las avenidas 10 de Agosto, Gran Colombia y la calle Luis Felipe
Borja.
Su construcción fue
decidida por el Cabildo de Quito el 8 de marzo de 1596, por iniciativa del
Corregidor Francisco de Sotomayor. El parque tiene una extensión de 6,3
hectáreas. Entre 1785 y 1790 se crearon los caminos y se instalaron los
primeros monumentos en su interior, el que fue cerrado en una extensión
aproximada a su actual dimensión. Hasta 1873, fecha en que comenzó la
construcción del Observatorio Astronómico, el triángulo que forma hoy este
paseo fue usado para pastorear animales. A pesar del tiempo transcurrido,
continúa siendo un importante centro para la distracción y relajamiento de los
residentes de Quito.
La Alameda es el parque
más antiguo de Quito. El sector donde hoy se asienta era conocido por los
nativos de la zona como Chuquihuada (punta de lanza), presuntamente debido a la
forma triangular de la planicie de terreno que el parque ocupa hasta hoy. El
cabildo de la ciudad colonial, conciente de la necesidad de un espacio de
recreo para los quiteños al más puro estilo de las ciudades europeas, decide la
delimitación de un área verde en el extremo norte de la ciudad. Los trabajos
inician inmediatamente después de la firma del decreto del corregidor, Francisco
de Sotomayor, el 8 de marzo de 1596.
Entre 1785 y 1790 se
crearon algunos de los caminos interiores que rodeaban la pequeña laguna
natural y que aún hoy se conservan, se instalaron los primeros monumentos en el
interior para embellecer el lugar, y se cerró el perímetro con un muro
decorativo bajo. Desde el inicio de la vida republicana de la nación hasta
aproximadamente 1873, cuando se inició la construcción del Observatorio
Astronómico, el parque fue utilizado por pastores de ovejas, que llevaban sus
animales a pastar en el lugar.
En 1877 se emprende una
reestructuración integral del parque ordenada por Marieta de Veintimilla,
sobrina del presidente Ignacio de Veintimilla y que hacía las veces de
vicepresidenta de la nación y también de Primera Dama. Su rediseño le brindó al
parque un estilo más ajardinado y europeo, placentero para los paseos de la
alta sociedad quiteña de la época.
En 1887 se inauguró en el
extremo norte del parque un edificio de estilo alpino, construído totalmente en
madera, que albergó el primer Jardín Botánico de Quito, mismo que era dirigido
por el sacerdote e investigador jesuita Luis Sodiro. Años después ese mismo
edificio sería utilizado para convertirse en la primera Escuela de Bellas Artes
de Quito, hasta que un incendio acabó con la estructura a finales del siglo
XIX.
Pasear por la Alameda, en
familia, resulta ameno. Entre los sitios o lugares maravillosos, como
atractivos del parque están: la iglesia de El Belén y el famoso Churo, mirador
popular, en la calle Sodiro; hacia el interior, la laguna artificial y el paseo
acuático en bote; el Observatorio Astronómico, construcción iniciada en 1873,
en la plazoleta central, hoy, administrado por la Escuela Politécnica Nacional;
el monumento dedicado a la Misión Geodésica Francesa, inaugurado en 1913; el
monumento en homenaje a Simón Bolívar, inaugurado el 24 de julio de 1935, hace
75 años. El busto dedicado a Manuelita Sáenz; el obelisco en recordación al
ecuatoriano, Alférez Honorario, Francisco Suárez Veintimilla, fallecido en
acción de guerra, en Marruecos.
Referencias:
Noticias Quito (2010-12-20) “La Alameda, el parque
emblema de Quito”. Recuperado el 31 de diciembre del 2012 desde: http://www.noticiasquito.gob.ec/Noticias/news_user_view/la_alameda_el_parque_emblema_de_quito--2142
Quito (s.f.) “Parque Alameda”.
Recuperado el 31 de diciembre del 2012
desde: http://www.quito.com.ec/index.php/explora-y-disfruta/parques/parque-alameda